¿Qué hace el rabo de gato?

Se considera antiinflamatoria, antiespasmódica, digestiva, antiséptica, vulneraria y cicatrizante.

Se ha indicado, en primer lugar, como remedio digestivo y carminativo, para aliviar gases y meteorismos, digestiones pesadas, el mal sabor de boca y el reflujo gastroesofágico.

Esta planta cuenta en su composición con flavonoides (incluyendo la sideritidoflavona), esteroides triterpénicos, aceite esencial, taninos, saponósidos, triterpenos y lactonas.

Estos componentes confieren al rabo de gato de acción diurética, antiséptica, digestiva, antiinflamatoria, cicatrizante, antibacteriana, espasmolítica, antiulcerosa, antifúngica.